martes, 30 de diciembre de 2014

Abrir las puertas a un nuevo año


Histórico, el 2014 marcó pautas en la vida cubana, Se apostó por el entendimiento- nada fácil de lograr-, es un don del Espíritu Santo, y no todos lo recibimos.

Hombres con libertades merecidas y la reanudación de relaciones diplomáticas con Estados Unidos, bien pueden dividir " eras" en un  mundo signado por el egoísmo enraizado en el tiempo.

Lo social admira en el final de este año.

En lo personal: mi hijo y mi nieto hermoso ponen el faro a mis días. Doy gracias a Dios por ellos.

El trabajo me fascina y no cesan de maravillarme las piruetas del destino en cuanto a las relaciones interpersonales.

El Nuevo Año será otra vuelta al Sol, con el desafío del apego y la conquista. ¡ Feliz viaje a todos!

Con el favor de Dios, nos encontraremos luego de 365 días en este punto para comentar.

martes, 23 de diciembre de 2014

Crónica de un EDUCADOR

Luisito, Doctor Luis

Por Elena Milián Salaberri

Una hidalguía que no molesta y la risa más cubana de cuantas haya, hacen al Doctor en Pedagogía Luis Ugalde Crespo, dueño de la escasa mezcla de respeto y accesibilidad propia de los grandes genios. Él lo es.

A su puerta llaman desde el más connotado pedagogo al simple pequeñín en busca de soluciones a sus dudas respectivas y, de allí, salen con respuesta convincente; por eso hablar de su erudición reclamaría espacios sin límites. El currículum asombraría a quienes no residen en su San Cristóbal natal, mejor, entonces, hablar de Luisito por dentro.

Nunca estuvo ajeno al dolor humano, ni cuando jugaba entre los sacos de la bodega de su difunto padre, un acaudalado vasco, de quien heredó la fortuna de su gran corazón, ni ahora que lo buscan para enrumbar una apremiante tesis de grado o para consultarle qué hay con el clima y entonces sale a la calle y le desentraña al cielo todo cuánto habrá, como buen geógrafo que es.

Son ya 68 sus años; sin embargo el brillo de sus ojos de un negror ardiente en comunión con mente sagaz y figura ágil, disimulan la larga historia del niño que fue, ese capaz de llegar al preuniversitario de Artemisa con solo once años de edad, previa anuencia del ministro de educación en los años de la Revolución naciente. A partir del bachillerato, desanduvo una vida de leyenda.

Sorteador de un amor filial sin fisuras, la marina de guerra lo acogió en el primer llamado al Servicio Militar, el fusil cedió paso a su anhelo de aprender el bíblico oficio de carpintero y encofrando una construcción, lo sorprendió la convocatoria juvenil al magisterio. Quedaría relegado su sueño de ser médico, ante el apremio de las almas de despojarse de la ignorancia.

Maestro y profesor de secundaria, internacionalista en Angola asesor en Perú, metodólogo, fueron misiones que alternó en diversos sitios; incluso ocupó responsabilidades profesionales en la Asamblea del Poder Popular en San Cristóbal, únicamente relegadas por su pasión a la pedagogía.

La historia de los Círculos Infantiles no se puede escribir sin su contribución, junto a Gina, la esposa del Comandante Julio Camacho, tampoco el perfeccionamiento de la educción en la montaña. En el Instituto Pedagógico Rafael María de Mendive, de Pinar del Río, se tornó indispensable, y ya máster y doctor, integró el departamento de dirección del Enrique José Varona, en la capital.

Jubilado, no retirado, integra hoy el Departamento de Organización, Planificación e Información (DOPI), en la Universidad de Artemisa, por donde se desliza raudo entre sus afanes de profesor titular, de impacto en la enseñanza de postgrado y sus aportes a las ciencias de la educación.

Acaba de recibir el Premio Pedagogía 2014, conferido por la filial provincial de la Asociación de Pedagogos de Cuba y aún el Doctor Luis Ugalde,  insatisfecho se levanta cada mañana, libros al hombro, como si tuviera alguna deuda con la sabiduría, sin reconocerse dueño de todos los aciertos.

  

 

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Un antes y un después

Día de San Lázaro, amigo de Jesús, venerado en Cuba incluso en épocas de fe silenciada, por muchas y hondas razones. Amanecimos, entonces, con la FE por tema.
Al mediodía, fue el culmen: se devolvía la libertad a hombres coartados injustamente y, luego de más de 53 años, se anunció la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos. Día para no olvidar, sobre todo para quienes hemos sufrido la crueldad del " absurdo", como dijera Miguel Barnet, presidente de la Unión de Escritores y Artistas Cubanos.
Les comparto la alocución del presidente cubano Raúl Castro. Aprovecho para ofrecerles disculpas por mis frecuentes errores mecanográficos, que solo evidencian mi personalidad de pura vasca, rauda y descontrolada, pero sensible.

Ahí les va el texto presidencial:

Compatriotas:

Desde mi elección como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, he reiterado en múltiples ocasiones, nuestra disposición a sostener con el gobierno de los Estados Unidos un diálogo respetuoso, basado en la igualdad soberana, para tratar los más diversos temas de forma recíproca, sin menoscabo a la independencia nacional y la autodeterminación de nuestro pueblo.

Esta es una posición que fue expresada al Gobierno de Estados Unidos, de forma pública y privada, por el compañero Fidel en diferentes momentos de nuestra larga lucha, con el planteamiento de discutir y resolver las diferencias mediante negociaciones, sin renunciar a uno solo de nuestros principios.

El heroico pueblo cubano ha demostrado, frente a grandes peligros, agresiones, adversidades y sacrificios, que es y será fiel a nuestros ideales de independencia y justicia social. Estrechamente unidos en estos 56 años de Revolución, hemos guardado profunda lealtad a los que cayeron defendiendo esos principios desde el inicio de nuestras guerras de independencia en 1868.

Ahora, llevamos adelante, pese a las dificultades, la actualización de nuestro modelo económico para construir un socialismo próspero e sostenible.

Resultado de un diálogo al más alto nivel, que incluyó una conversación telefónica que sostuve ayer con el Presidente Barack Obama, se ha podido avanzar en la solución de algunos temas de interés para ambas naciones.

Como prometió Fidel, en junio del 2001, cuando dijo: ¡Volverán!, arribaron hoy a nuestra Patria, Gerardo, Ramón y Antonio.

La enorme alegría de sus familiares y de todo nuestro pueblo, que se movilizó infatigablemente con ese objetivo, se extiende entre los cientos de comités y grupos de solidaridad; los gobiernos, parlamentos, organizaciones, instituciones y personalidades que durante estos 16 años reclamaron e hicieron denodados esfuerzos por su liberación. A todos ellos expresamos la más profunda gratitud y compromiso.

Esta decisión del Presidente Obama, merece el respeto y reconocimiento de nuestro pueblo.

Quiero agradecer y reconocer el apoyo del Vaticano, y especialmente, del Papa Francisco, al mejoramiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Igualmente, al Gobierno de Canadá por las facilidades creadas para la realización del diálogo de alto nivel entre los dos países.

A su vez, decidimos excarcelar y enviar a Estados Unidos a un espía de origen cubano que estuvo al servicio de esa nación.

Por otra parte, basados en razones humanitarias, hoy también fue devuelto a su país el ciudadano norteamericano Alan Gross.

De manera unilateral, como es nuestra práctica y en estricto apego a nuestro ordenamiento legal, han recibido beneficios penales los reclusos correspondientes, incluida la excarcelación de personas sobre las que el Gobierno de los Estados Unidos había mostrado interés.

Igualmente, hemos acordado el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.

Esto no quiere decir que lo principal se haya resuelto. El bloqueo económico, comercial y financiero que provoca enormes daños humanos y económicos a nuestro país debe cesar.

Aunque las medidas del bloqueo han sido convertidas en Ley, el Presidente de los Estados Unidos puede modificar su aplicación en uso de sus facultades ejecutivas.

Proponemos al Gobierno de los Estados Unidos adoptar medidas mutuas para mejorar el clima bilateral y avanzar hacia la normalización de los vínculos entre nuestros países, basados en los principios del Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas.

Cuba reitera su disposición a sostener cooperación en los organismos multilaterales, como la Organización de Naciones Unidas.

Al reconocer que tenemos profundas diferencias, fundamentalmente en materia de soberanía nacional, democracia, derechos humanos y política exterior, reafirmo nuestra voluntad de dialogar sobre todos esos temas.

Exhorto al Gobierno de los Estados Unidos a remover los obstáculos que impiden o restringen los vínculos entre nuestros pueblos, las familias y los ciudadanos de ambos países, en particular los relativos a los viajes, el correo postal directo y las telecomunicaciones.

Los progresos alcanzados en los intercambios sostenidos demuestran que es posible encontrar solución a muchos problemas.

Como hemos repetido, debemos aprender el arte de convivir, de forma civilizada, con nuestras diferencias.

Sobre estos importantes temas volveremos a hablar más adelante.

Muchas gracias.

martes, 2 de diciembre de 2014

Mi amigo Jerry


Sin otra aspiración que un poco de charla y, si acaso, un café, llega a mi casa mi amigo Jerry, cuando el trabajoso amor por los niños se lo permite.es especialista de segundo grado en Pediatría y dirige la sala de cuidados intensivos en el hospital de San Cristóbal.

Lo conozco desde la época en que apenas podía sujetar el esteto a su cuerpo; era frágil, mas las ganas de amar se le saltaban a los ojos. Entonces, se adentró en su pasión médica de hacer hombres y mujeres sanos de los niños y, a eso le pone una fuerza más allá de su estatura.

No conoce de día o de noche; mide el tiempo en pacientes por jornada: los de su sala, los que le esperan fuera para cuando tiene oportunidad, la larga fila en la escalera y, quienes como yo, lo llaman por teléfono en la madrugada para consultarle una urgencia. Jamás un desplante ni a amigos ni a desconocidos.

De su entrega supieron Venezuela y Laos, junto a cada poblador de San Cristóbal y vecindades, cercanas y no tanto, como los municipios de la nueva provincia de Artemisa, que se atienden en la sala a su cargo; por supuesto, en casos graves.

Su nombre correcto es Jorge Enrique Padrón Álvarez, lo de Jerry viene de las clases de inglés, en sus años de estudiante, cuando la profesora lo empezó a llamar así. Algo aniñado ese mote, igual a su encanto imbatible por el tiempo.

Es el padrino de mi nieto Hernán, porque sí, en Cuba la apertura con la Iglesia marcha y, ya el credo se lleva a todas voces, gracias a Dios.

Ayer me acompañó Jerry en la amigdalitis viral de m i nietecito, ya hoy me pasó un mensaje indagando por su estado, seguro en medio de no pocos niños con la vida en sus manos.

Gracias.