miércoles, 13 de mayo de 2015

Martí y Carmen, amor en una elegía

El epistolario entre José Martí y Carmen Zayas Bazán motivó el argumento central de un texto literario inédito, de autor pinareño, quien aborda el patriotismo del Héroe Nacional de Cuba mediante el prisma de su esposa.

   En Elegía Martiana -16 cuartillas- Víctor de Armas, recientemente fallecido, adopta la posición de acompañar al Maestro desde la época de sus trabajos forzados en las Canteras de San Lázaro, hoy Fragua Martiana, hasta su caída en combate en Dos Ríos, con particular énfasis en la relación amorosa entre él y Carmen.

   Para esa parte de la obra poética, basada en hechos reales recreados, según su punto de vista, el escritor consultó el epistolario de ambos amantes a partir del volumen La Vida íntima y secreta de José Martí, del historiador Carlos Ripoll, y de cartas archivadas en la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado.

   Familiares de Víctor de Armas explicaron a la AIN que la motivación le surgió tras analizar la fallida unión de la joven camagüeyana y el Apóstol, y las diferencias de esa relación con las de otros patriotas como Máximo Gómez, Antonio Maceo e Ignacio Agramonte con Manana, María y Amalia, respectivamente.

   La primera parte de la correspondencia revela a una mujer enamorada e inteligente, pero luego de la segunda deportación de Martí aparecieron rasgos propios de su vida en el ambiente de opulencia ajeno a sentimientos patrióticos, limitación no superada siquiera por el amor, como consta en el texto.

   El tema elaborado por el poeta pinareño desde la perspectiva de Carmen Zayas Bazán, sobre la base de  documentos reales, analizados previamente, devela el entramado del  turbulento amor, que si bien fructificó en un hijo, se vio signado por el fracaso ante las diferencias de clases.

   Ella fue esposa fiel, madre sacrificada, pero nunca la mujer capaz de apoyar a su pareja en el sagrado deber de hacer libre a su patria, a la cual consagró su vida Martí, fundador del Partido Revolucionario Cubano en las luchas contra la metrópoli española, señala la obra.

   Propuesta para editarse, Elegía Martiana fue la última obra del poeta y escritor pinareño Víctor de Armas, autor del ensayo Celestino García, el rey de los versadores, entre otros títulos. 

Martí visto en su caligrafía

La determinación de rasgos de la personalidad de José Martí a través de estudios grafológicos constituye una peculiar aproximación al Héroe Nacional de Cuba, a cargo de un investigador cultural pinareño.

   Arturo Márquez, escritor y poeta local, analizó la ordenación general, las líneas, letras y sus enlaces y la firma en textos redactados por el Maestro en su niñez y adultez, tras lo cual evaluó sus facultades intelectuales, la voluntad y rasgos de la moral.

   En su investigación, premio Relevante en el Forum de Ciencia y Técnica, el autor avala la veracidad de los resultados del análisis de grafología, con la opinión expresa sobre Martí de 27 personas que lo conocieron, entre ellas Blanche Zacharie, Máximo Gómez, Enrique Collazo y Marcos de Rosario.

   Según el estudio, la carencia de adornos en la caligrafía denota en el Apóstol una cultura muy desarrollada; la originalidad, su genio; los rasgos oblicuos, el espíritu polemista e independiente; la escritura inclinada a la derecha, extroversión y las líneas hacia arriba develan preocupación por lo espiritual.

   Al examinar la firma de José Martí, el estudioso precisa que el hecho de no subrayarla revela insatisfacción consigo mismo; la sencillez de las letras iniciales, temperamento firme y el destacar el apellido habla de su espíritu de grupo y del orgullo familiar. 

   Por otra parte, luego de valorar rasgos inexistentes en sus manuscritos, la investigación concluye que el Héroe Nacional de Cuba no era débil, mentiroso, egoísta, hipócrita, de genio adulador, despótico, vulgar, indeciso ni tampoco alegre.

   Acerca de este acercamiento a  José Martí, la historiadora Felina Rodríguez resalta a la grafología como un campo poco explorado de su vida y obra, susceptible de perfeccionarse con estudios más profundos capaces de sacar a la luz facetas que humanizan la concepción mítica que los pueblos tienen de sus héroes.

   Arturo Márquez ( San Diego de los Baños, 1953), ha publicado 11 libros, como el poemario Polo de un hechizo, dedicado al fallecido cantautor Polo Montañez, y entre sus múltiples premios tiene el lauro en poesía en el primer concurso nacional Para un amigo sincero, del Memorial José Martí.